El funcionario recibió varios tiros, a través del vehículo que presentó múltiples impactos, sus agresores intentaron quemar el cuerpo y las llamas solo le afectaron las piernas.
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Sábado, 25.03.2016
Felicita Blanco
Caracas.-
Más de 20 hombres emboscaron al supervisor jefe de la Policía de Caracas, Larry Morillo (46), cuando llegaba en su vehículo al sector 1º de Mayo en El Cementerio, la noche del pasado miércoles, lo acribillaron, trataron de quemarlo y las llamas solo le afectaron las piernas. También mataron a su hijo mayor.
El funcionario recibió varios tiros, a través del vehículo que presentó múltiples impactos, sus agresores intentaron quemar el cuerpo y las llamas solo le afectaron las extremidades inferiores.
Su hijo Yonaiker Oswaldo Morillo Álvarez (20) habría intentado auxiliarlo, pero los criminales se lo impidieron, el muchacho corrió a resguardarse en la casa de su abuela y hasta allá lo persiguieron para ejecutarlo de un tiro en la cabeza.Felicita Blanco
Caracas.-
Más de 20 hombres emboscaron al supervisor jefe de la Policía de Caracas, Larry Morillo (46), cuando llegaba en su vehículo al sector 1º de Mayo en El Cementerio, la noche del pasado miércoles, lo acribillaron, trataron de quemarlo y las llamas solo le afectaron las piernas. También mataron a su hijo mayor.
El funcionario recibió varios tiros, a través del vehículo que presentó múltiples impactos, sus agresores intentaron quemar el cuerpo y las llamas solo le afectaron las extremidades inferiores.
El cuerpo del muchacho quedó en su cuarto, sobre la cama.
Morillo era jefe de la Brigada Motorizada, tenía 21 años de servicio y dejó huérfanas a dos niñas menores. El miércoles terminó su jornada laboral y se dirigía a la casa de su madre, donde también acostumbraba a quedarse algunas veces su hijo. En lo que va de año han asesinado a 32 policías y militares.
Yonaiker Morillo estudiaba el último año de administración tributaria en el Iutirla de Bello Monte. A veces se quedaba en casa de su madre, otras con su abuela en El Cementerio y también con su padre en Plaza Venezuela.
Era soltero, sin hijos y tenía amores con una joven compañera de estudios.
Los colegas de Morillo estaban este jueves en la morgue tramitando el retiro del cuerpo. Su padre es funcionario jubilado de la PM. Los oficiales de Policaracas estaban consternados, indignados, impotentes.
Las labores de búsqueda de los criminales no dieron resultados esa noche. Intentaron encontrarlos peinando el cerro, no contaban con armamento apropiado ni balas y tuvieron que pedirle refuerzo a la Policía de Chacao que junto con el Cicpc acudió al sitio.
Los policías se sienten entrampados y aunque lo prohíbe el reglamento interno, desean ir a un paro nacional para llamar la atención del Gobierno.
Información de:
http://eltiempo.com.ve
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