La joven de 18 años fue hallada con quemaduras, heridas y torceduras mientras que su hijo resultó ileso; pasaron cinco días en la selva
La mujer fue rescatada ayer después de permanecer desaparecida desde el sábado. Foto: ?@josetv4020 |
María Nelly Murillo sacó fuerzas del recuerdo de su madre y de su propio instinto maternal para sobrevivir cinco días en la selva con su bebé tras estrellarse la avioneta en que viajaban. Ambos fueron encontrados el miércoles después de un accidente aéreo en una remota zona del departamento del Chocó, en el noroeste del país. La noticia conmovió a Colombia.
"Apenas pienso en mi mamá y en mi hijo", dijo la joven de 18 años a los voluntarios de la Cruz Roja que la encontraron dormida junto a su hijo de ocho meses, Yudier Moreno, cerca de un zanjón. Habían buscado protegerse en la tupida selva del Alto Baudó. La mujer tenía quemaduras de primero y segundo grado, un pie cortado y un tobillo torcido; el bebe estaba ileso. "'¡Auxilio!, ¡Auxilio!', fue lo primero que nos dijo cuando nos vio", relató uno de los socorristas que participó en las tareas de búsqueda desde el principio.
"Le dije: 'Mami, quédate quieta', porque ella trataba de levantarse y no podía. Me pedía agua y comida", agregó. "El bebé tenía frío, así que lo abrigué con mi camisa. Lloró cuando lo tomé, pero le di suero y se calmó. Se quedó dormido conmigo todo el rato", relató.
La foto del socorrista, de apellido Rentería, con el bebe en brazos, atado con arnés a bordo del helicóptero que trasladó a los sobrevivientes a Quibdó, capital del Chocó, dio la vuelta al mundo.
"Le dije: 'Mami, quédate quieta', porque ella trataba de levantarse y no podía. Me pedía agua y comida", agregó. "El bebé tenía frío, así que lo abrigué con mi camisa. Lloró cuando lo tomé, pero le di suero y se calmó. Se quedó dormido conmigo todo el rato", relató.
La foto del socorrista, de apellido Rentería, con el bebe en brazos, atado con arnés a bordo del helicóptero que trasladó a los sobrevivientes a Quibdó, capital del Chocó, dio la vuelta al mundo.
"Es un milagro. Es una zona muy selvática. El accidente fue catastrófico. Su espíritu de madre debe haberle dado las fuerzas", dijo el coronel Héctor Carrascal, comandante de la Fuerza Aérea Colombiana, a cargo de las tareas de búsqueda, iniciadas cuando la aeronave se declaró desaparecida el sábado.
Carrascal explicó que el fuselaje fue identificado el domingo, cuando se verificó la posibilidad de que podría haber sobrevivientes al encontrarse abierta la puerta del aparato. Un equipo de 14 rescatistas accedió al lugar mediante sogas y comenzó las labores de socorro.
Agencia AFP
Carrascal explicó que el fuselaje fue identificado el domingo, cuando se verificó la posibilidad de que podría haber sobrevivientes al encontrarse abierta la puerta del aparato. Un equipo de 14 rescatistas accedió al lugar mediante sogas y comenzó las labores de socorro.
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