Los victimarios frenaron frente a la vivienda en la que conversaba Vega, llamaron su atención y cuando él giró para ver hacia el vehículo, recibió los disparos.
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| Las comisiones de la Policía científica se trasladaron al sitio. (Foto: Archivo) |
Isamar Cristina Prieto
Maracaibo
noticias@laverdad.comÁngelo Josué Vega Basabe (26) recibió 20 balazos en el rostro mientras conversaba con un vecino en la avenida 51 del barrio San Sebastián. Los testigos comentaron que los homicidas en un vehículo, del que no aportaron las características, aprovecharon que Vega detuvo su Bera blanca en la acera, para asesinarlo.
Ayer, los victimarios frenaron frente a la vivienda en la que conversaba Vega, llamaron su atención y cuando él giró para ver hacia el vehículo, recibió las detonaciones. El vecino, con quien conversaba, corrió a esconderse.
Vega murió al instante, sus sesos quedaron por toda la carretera. Los disparos alertaron a los familiares del occiso, quienes al recibir la noticia de que Vega recibió las detonaciones corrieron, entre gritos y lamentos, por la calle 126 B de la comunidad con una sábana blanca para cubrir el cuerpo de su pariente.
Vega salió de su casa a visitar a sus primos en la barriada del sector Pomona, donde lo mataron a las 9.00 de la mañana. "Los que vieron no van a hablar por temor. Ángelo no tenía problemas con nadie, era un buen muchacho. Casi todos los días nos visitaba. Él se crió en el barrio", declaró su tía, quien decidió no identificarse. Los curiosos apuntaron que el agredido era un muchacho muy querido por la comunidad.Maracaibo
noticias@laverdad.comÁngelo Josué Vega Basabe (26) recibió 20 balazos en el rostro mientras conversaba con un vecino en la avenida 51 del barrio San Sebastián. Los testigos comentaron que los homicidas en un vehículo, del que no aportaron las características, aprovecharon que Vega detuvo su Bera blanca en la acera, para asesinarlo.
Ayer, los victimarios frenaron frente a la vivienda en la que conversaba Vega, llamaron su atención y cuando él giró para ver hacia el vehículo, recibió las detonaciones. El vecino, con quien conversaba, corrió a esconderse.
Vega murió al instante, sus sesos quedaron por toda la carretera. Los disparos alertaron a los familiares del occiso, quienes al recibir la noticia de que Vega recibió las detonaciones corrieron, entre gritos y lamentos, por la calle 126 B de la comunidad con una sábana blanca para cubrir el cuerpo de su pariente.
Sus allegados informaron que Ángelo Vega conservaba sus pertenencias y alegaron que la causa no se debía a un robo. Era prestamista desde hacía muchos años, vivía con su esposa y sus tres hijos en el barrio Los Robles. Era el menor de dos hermanos.
La Policía científica investiga el crimen como una venganza. Investigan si la víctima tenía antecedentes o registros policiales.
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