INTERNACIONALES
VIERNES 22 DE JUNIO DE2012
El presidente paraguayo Fernando Lugo será sometido hoy a un juicio político en el que podría ser destituido, luego de que ayer la Cámara de Diputados reclamara la aplicación de esta medida contra el mandatario, acusado de mal desempeño en sus funciones.
La incertidumbre puso en alerta al hospital de emergencias por si se presentan disturbios, y los comercios del centro y las escuelas cerraron sus puertas. El Senado, convertido en tribunal, admitió la acusación de los diputados, que aprobaron el juicio por 76 votos a favor, uno en contra y tres ausencias, y dispuso que hoy se desarrollara el juicio de valoración política.
El juicio político es por la muerte de seis policías y 11 campesinos durante un desalojo de “sin tierras” el pasado día 15 en la hacienda del político y empresario “colorado” Blas N. Riquelme en Curuguaty (nordeste). Ese hecho desembocó en la renuncia del ministro del Interior, Carlos Filizzola, y del jefe de la policía.
La oposición acusa a Lugo de la responsabilidad última de la sangrienta balacera entre los policías y campesinos, pero también señalan su vínculo con líderes de organizaciones de campesinos que invaden haciendas privadas y el supuesto nepotismo en la administración pública.
La Iglesia católica paraguaya pidió el jueves al presidente que se aparte del cargo antes de que concluya el juicio político en su contra, para evitar una mayor tensión política en el país. El jefe del Ejecutivo, un ex obispo que ha sobrevivido a un cáncer linfático y a sucesivos escándalos de paternidad, aceptó el juicio, pero aseguró que no renunciará.
“Este presidente anuncia que no va a renunciar al cargo y que se somete con absoluta obediencia a la Constitución y las leyes a enfrentar el juicio político con todas sus consecuencias”, dijo.
Lugo también será denunciado ante la justicia ordinaria por las irregularidades cometidas durante su administración, anunciaron los fiscales en el Congreso Nacional. En el extranjero algunos líderes latinoamericanos, incluyendo al presidente boliviano Evo Morales, denunciaron lo que llamaban “golpe de Estado” contra Lugo.
El presidente podrá defenderse hoy personalmente o a través de abogados. Luego, el Senado valorará los argumentos y votará si lo destituye o lo absuelve. Si el ex obispo católico es destituido, el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) volverá a ocupar la presidencia del país luego de 76 años. El vicepresidente Federico Franco, del PLRA, “está listo para asumir el mando y pacificar el país”, adelantó el diputado liberal Enrique Sallim Buzarquis.
Filizzola definió la situación como “un golpe institucional”, mientras el dirigente paraguayo Ricardo Canesse, dijo que el juicio era “una payasada”. Al anochecer, se informó que Lugo, estaba “sereno” antes de recibir a a los cancilleres de la Unasur (Paraguay, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela) que viajaron a Asunción para apoyar la estabilidad paraguaya. El teniente coronel Amado Ramírez, vocero militar, dijo que “las fuerzas armadas se mantienen en sus funciones específicas establecidas por las leyes, respetando el Estado democrático
Tomado de http://www.eluniversal.com.mx
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